mayo 21, 2009

LOS FAVORES NOS COSTARAN MUY CAROS

Néstor Kirchner ha exhibido el monopolio de la lapicera para inscribir candidaturas en la provincia de Buenos Aires, pero sufre como nunca las presiones y las amenazas de quienes no le perdonarían quedar fuera del reparto de poder tras años de servilismo. El titular de la CGT, Hugo Moyano, pronunció en la avenida 9 de Julio, con motivo del Día del Trabajo, el discurso más complaciente hacia el Gobierno que se le escuchó a un líder sindical en muchos años. Pero como en la vida nada es gratis y menos esta clase de favores, que de a poco alejan a Moyano de su preciada CGT, bajo la fachada de ese mensaje adulador, se escondía una clara ambición, más poder y concretamente, el del Ministerio de Salud. El sector piquetero encabezado por Luis D´Elía formuló demandas parecidas, aunque apuntando menos alto se conforma con algunos lugares en las listas de diputados nacionales y de legisladores bonaerenses.

El tamaño de las concesiones que los Kirchner les han hecho al sindicalismo y al citado grupo piquetero en la presentación de listas de candidatos da una idea del grado de debilidad de la fracción gobernante. Pero un diagnóstico más cabal sólo se podrá hacer después del 28 de junio, cuando se advierta si persiste el espíritu adulador que en su discurso público transmiten hoy esos sectores hacia el Gobierno. Como primer mandatario, Néstor Kirchner siempre respetó a quien demostraba capacidad para controlar la calle. El poder de fuego de Moyano y de los piqueteros lo decidió a pactar con ellos. Ahora, al aproximarse el ocaso del kirchnerismo, todos van por más. Pero la debilidad de Kirchner no se termina ahí. El primer rasgo de flaqueza se advirtió cuando Kirchner debió recurrir a Daniel Scioli para que lo acompañara como candidato ficticio. La segunda señal se vio cuando se les reclamó a los intendentes de los distritos bonaerenses que lideraran las listas de diputados provinciales, aunque nunca fueran a asumir esas bancas. Más que para atraer votantes, fue una jugada desesperada del ex presidente, tendiente a abortar negociaciones que algunos jefes comunales invadidos por el miedo habían comenzado a entablar con el peronismo disidente.

Los signos continuaron con la rutilante incorporación de Nacha Guevara como candidata a diputada. Este es el ejemplo cabal de los que entienden que para seducir a un electorado que no cree en los dirigentes políticos la única forma es mediatizar la política con figuras del espectáculo. El ingreso de la actriz y cantante en la vida política es también una forma de reencarnar a Eva Perón en el imaginario colectivo de los más tradicionales votantes del PJ. Es un síntoma claro de que el kirchnerismo teme perder votos peronistas ante la lista que encabezan Francisco de Narváez y Felipe Solá. Cuando todo se mueve y se cambia permanentemente es porque no se percibe que el triunfo esté cerca o porque la incertidumbre es grande. En suma, todos tratan de renovar la fe y generar tranquilidad y confianza en sus respectivas sociedades acerca de que con cautela y medidas atinadas se podrán dejar atrás las calamidades que han golpeado a sus respectivas estructuras económicas y sociales. En la Argentina son los propios gobernantes los que insólitamente amenazan con la peor de las crisis si el resultado de las elecciones les resulta adverso. En otras palabras, los argentinos han postergado decisiones para así poder determinar si los vaticinios del gobierno terminan, o no, siendo reales. Con lo cual la crisis prenunciada por despecho e imprudencia y como parte de una campaña electoral puede hasta llegar a tener principio de ejecución más allá del real resultado electoral.

Gane o pierda el oficialismo, el país se ha detenido a la espera de los acontecimientos. La estrategia electoral del matrimonio gobernante ha aumentado la desconfianza y la incertidumbre, además de acercar la posibilidad de una crisis presuntamente inevitable. Esto es mucho más grave aún para eventuales inversores extranjeros, que escuchan con atención y precaución los dichos del oficialismo. La fragilidad económica real y la falta de confianza explican los U$S 6000 millones que han huido del país en lo que va del año, que se suman a los U$S 23.000 del año pasado. Más allá de índices, esas cifras confirman el altísimo grado de desconfianza de aquellos que tienen en la Argentina alguna capacidad de ahorro. Si los propios argentinos llevan su dinero fuera del país, menos puede esperarse que sean los de afuera quienes inviertan para volver a poner en funcionamiento nuestra economía. Lo cierto es que las desafortunadas advertencias de los Kirchner desnudan una verdad evidente, la incapacidad para asegurar gobernabilidad en el marco de la República sin recurrir al populismo, al temor y a la concentración inédita de poder que hoy existe.

2 comentarios:

Mariel dijo...

Creo que estamos por vivir un nuevo día, que se considerará como histórico para las futuras generaciones y es el 29/06/09...es el día en que habrá que dar respuesta a todo lo postergado...en que habrá que devolver los favores solicitados...en que habrá que convencer al mundo que somos nuevamente confiables...
Insólito para un país, generar un nuevo día histórico a raíz de una elección para renovación de Cámaras.
Claro, es Argentina.

BESO

BE&P Consulting dijo...

Y NUNCA MEJOR EXPLICADO, ESTO ES ARGENTINA. ELECCIONES LEGISLATIVAS Q DEFINEN EL FUTURO DE UN PAIS.
UN BESO