mayo 20, 2009

MEDIDAS INCONSISTENTES

Días atrás en la Argentina buena parte del comercio de granos se paralizó. En las zonas donde se está cosechando, prácticamente no se transportaron cereales ni oleaginosas, y hubo camiones cargados que no pudieron transitar. La razón si una vez más, con el guiño cómplice del gobierno y de la mano de Ricardo Echegaray la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) puso en vigor el Código de Trazabilidad de Granos (CTG), un nuevo requisito para el movimiento de la mercadería, que debe tramitarse mediante la página de Internet del organismo. Como era de imaginar en tiempos en los que el ejecutivo necesita recaudar se implemento en tiempo record un nuevo programa dentro de la página del organismo y el sistema colapsó. Por consiguiente toda la logística granaria se detuvo. En algunas localidades ni siquiera pudieron conectarse, pero por razones de infraestructura, ya que no hay banda ancha ni redes celulares 3G para acceder a Internet.

Por eso, el campo pidió una nueva "audiencia urgente" a la ministra de la Producción, Débora Giorgi, devenida en bocera oficial del gobierno y al jefe de la AFIP, Ricardo Echegaray. En una carta enviada a los funcionarios, la Comisión de Enlace pidió rever el nuevo sistema de entrega de cartas de porte y, en especial, el CTG. Mediante este código sin el cual no pueden circular los camiones con granos, el ente recaudador prevé controlar la operatoria comercial para reducir la evasión fiscal. La AFIP ya había modificado en enero el sistema de entrega de las cartas de porte el documento respaldatorio de la mercadería transportada, que hasta entonces eran distribuidas por la Federación Agraria y los centros de acopiadores, que para tal fin mantenían decenas de ventanillas en el interior del país. Más recientemente, el ente recaudador les retiró a las bolsas de cereales la atribución que tenían desde hace años de ser garantes de la confiabilidad de los operadores compradores, vendedores o intermediarios. Se emiten cartas de porte en el medio del monte, en el Impenetrable, donde no hay Internet ni computadora; el productor no tiene los conocimientos para acceder al sistema, y el que tiene conocimientos no puede acceder porque no funciona.

Los que diseñaron estas cuestiones dejan mucho que desear, están detrás de un escritorio, y creen que todo está en Internet, desde la Federación Argentina del Transporte Automotor de Cargas (Fatac), entidad que agrupa a unos 10.000 vehículos, fueron muy gráficos en sus apreciaciones, el productor no hizo la escuela primaria y el transportista fue solamente dos días, ¿Qué pueden hablar de Internet? Se sigue cosechando y los viajes no se realizan, así el transporte de granos va todo a pérdida. Hace unos dos años, en la provincia de Buenos Aires se instrumentó para todo el transporte de cargas el Código de Operaciones de Traslado (COT), un sistema similar al nuevo código de la AFIP. Pero a diferencia del CTG, el COT no se aplica para el movimiento de granos entre los campos y las plantas de acopio, si un camión no puede descargar en el acopio porque debe acondicionar la mercadería fundamentalmente, secado, el problema es que no puede volver. ¿Cómo hace para ir de la planta al acondicionador si no puede circular legalmente?

Los ejemplos de esta interminable persecución al sector más productivo de nuestro país abundan. En San Manuel, una localidad a 120 kilómetros de Necochea, no hay banda ancha y cada CTG demora en promedio entre 20 y 25 minutos. Ahí, un acopio que tenía que cargar 10 camiones tuvo que poner a un administrativo a cargar los datos durante tres horas. En Dorrego López, en la misma zona, para cargar 20 camiones un acopio puso a una persona durante siete horas sentado frente a la computadora gestionando cada CTG. Para quien conoce de cerca el movimiento granario, con las nuevas cartas de porte los valijeros se están haciendo un festín. El valijero es un personaje mítico del campo Argentino y recibe su nombre del maletín lleno de plata con el que recorre la Pampa Húmeda comprando granos en negro. Hasta que se cambió el sistema de emisión, estos documentos estaban impresos en papel moneda, con tantas medidas de seguridad como las que tienen los cheques. Ahora, en cambio, al gestionarse por Internet se pueden imprimir en cualquier lugar y sin medida de seguridad alguna.

2 comentarios:

Mariel dijo...

220 km dice el cartelito que hay en la salida del pueblo…hasta Paraná…por lo que yo en el día de ayer hice 440 km (ida y vuelta…amén de salvar mi vida realmente de milagro al regreso) para asistir a una “Charla Informativa” de AFIP, exclusiva dedicada a Cartas de Porte y Código de Trazabilidad…demás está decir que las personas encargadas de la disertación no tenían idea lo que se vive del otro lado del escritorio…entre otras cosas, dijeron las siguientes absurdidades :
* Es un sistema que está a prueba…a lo que un asistente a la Charla preguntó: y cuando me llegue una inspección y me encuentre inconsistencias, me va a aceptar cómo respuesta “el sistema estaba a prueba”? La respuesta de AFIP fue: eso no lo podemos responder.
Claro que no lo podían responder, si hoy ya salieron las inspecciones http://contadores.infobaeprofesional.com/notas/82325-Controlan-el-transporte-de-granos-en-importantes-puertos-del-pais.html
* NI intenten enviar un SMS para pedir Código porque es imposible lograr escribir los 78 caracteres que requiere el mismo (Palabras de funcionaria de AFIP)
* Les aconsejamos NO descargar un camión si no está la Carta de Porte y el Código en correcta forma…a lo que se le dijo que en ocasiones las formas están, lo que NO está es el acceso a la página de AFIP…y que el cereal (arroz, por ejemplo por su humedad) no puede permanecer en el camión…la respuesta a esto fue muy cómica, la funcionaria esbozó una sonrisa y un leve levantamientos de hombros…

Y así, puedo seguir contándole de qué modo perdí un día de hacer otras cosas y casi la vida, por un simple muy simple sistema implementado por nuestra Administración Federal de Ingresos Públicos…

Un beso.

BE&P Consulting dijo...

No me quedaban dudas de que los comentarios que vertieras sobre esa charla informativa tendrían este tenor.
Algo entre trágico, comicidad, y absoluta desepción. Y lo peor es que la verdadera respuesta a la pregunta de este asistente a la charla, seran intimaciones judiciales por falta de pagos etc.
Como digo en la nota, la incansable persecución al sector más productivo Argentino.
SALUDOS MARIEL