julio 02, 2009

LO QUE FUE Y LO QUE SERA

Se trató de un hecho histórico para un gobierno justicialista a lo largo de los más de 60 años de existencia del peronismo. Sin intención de jactarnos al respecto, como lo hemos venido comentando, la indiscutible derrota sufrida por el oficialismo en el 90% del país dejará al kirchnerismo sin quórum propio en ambas cámaras legislativas a partir del próximo 10 de diciembre. Francisco de Narváez se erigió en uno de los mayores líderes políticos de la Argentina y a su vez Julio Cobos se convirtió en el candidato de más peso de las corrientes no peronistas de cara a las elecciones presidenciales en 2011. De Narváez no sólo derrotó personalmente a Kirchner, el ex hombre fuerte de la Argentina durante los últimos seis años; también ganó en el mayor y más contundente distrito electoral del país. De Narváez contó con el apoyo de Macri en el díscolo conurbano y aunque Macri no hizo una excelente elección en la Capital, tuvo debe reconocérsele un papel protagónico en el proyecto que derrotó a Kirchner por primera vez en 22 años de política.

El kirchnerismo finalmente ha concluido su ciclo político. En el tiempo que le resta Kirchner hará lo que pueda o lo que quiera para preservar, o no según le venga en gana, una inestable gobernabilidad. Además, el peronismo tiene desde ya desde el lunes al candidato que buscaba para relevar el liderazgo de Kirchner. Carlos Reutemann, quien ganó en Santa Fe contra la mayoría de los pronósticos. Reutemann es uno de los pocos referentes que el peronismo no discute, ni discutirá si quiere tener posibilidades en las próximas elecciones presidenciales. Por su parte Macri, en la noche del viernes último, ya pensaba seriamente en lanzar su candidatura presidencial en las subsiguientes 72hs., si ganaban la Capital y en Buenos Aires. Esos triunfos sucedieron, y De Narváez ya está dispuesto a negociar con Macri, Reutemann y Cobos la continuidad de la, gobernabilidad sin importar lo que haga Kirchner en los tiempos inminentes. Lo cierto es que De Narváez sólo quiere despejar pronto el escenario de las futuras elecciones presidenciales, considerando que sólo Cobos, entre los principales líderes no peronistas, se alzó con un triunfo arrollador en Mendoza. ¿Es sólo casualidad que los tres hombres que tuvieron un notable protagonismo contra Kirchner en el conflicto contra el sector agropecuario, De Narváez, Reutemann y Cobos hayan ganado en el domingo de elecciones? No.

Una lectura rápida y sin demasiado análisis del por que, de la derrota de Kirchner en Buenos Aires se explica desde el profundo rechazo que su figura provoca en el interior rural de la provincia, más profundo aun que el que estimaban las mediciones de opinión pública. Buena parte del conurbano se contagió también de esas fobias. Kirchner pertenece a esa raza de políticos que no abandonan el poder hasta que los echan. La incógnita consiste en saber si él considera que el domingo pasado, la sociedad lo echó. Debió de ser una dura sorpresa para él ya que sus palabras de los últimos días, habían sido contundentes, Ganaremos Buenos Aires por más de 10 puntos. Si fue franco, entonces está desde hace mucho tiempo perdido en un su laberinto de paranoias conspirativas. Kirchner redundó en su error de enfrentar al campo hasta ponerlo de rodillas. Llegó a hipotecar la única solución argentina para esquivar una parte de la crisis económica internacional con tal de no perdonarles a los campesinos la irreverencia de haberle dicho que no.

Cometió demasiados errores, desde pronosticar un nuevo 2001, si resultaba derrotado, hasta pedirle públicamente a De Narváez que se presentara ante un juez sospechado y sospechoso. En los últimos tiempos, sólo se rodeo de Hugo Moyano y del progresismo peronista, que no es malo por progresista, sino por antiguo. En conjunto, todas las fuerzas de oposición controlarán la Cámara de Diputados, con más de 140 escaños, ante una representación kirchnerista que retrocederá a 103 legisladores propios más una docena de aliados, pagos por su puesto. Y en el Senado tal como se preveía, el kirchnerismo perdió cuatro bancas y quedó con un legislador por debajo del quórum de 37 presentes. Este es el número que permite habilitar el debate y que le garantiza a quien lo posea la aprobación segura de un proyecto. En este escenario, la Casa Rosada estará obligada a consensuar con la oposición la sanción de cualquier proyecto. En otras palabras, a partir de diciembre próximo ya no podrá disponer de las cómodas mayorías que le han permitido convertir al Congreso en una escribanía de lujo del Poder Ejecutivo.

2 comentarios:

Mariel dijo...

Y ahora, de golpe...todos quieren irse...lo más rápido que se pueda, despegarse de la figura K...
-Fernandez el domingo puso su renuncia a disposición
-Jaime (el del avioncito) renunció
-Moreno, que sí que no...personalmente no creo que lo haga.
-Moyano que dice que si es mejor para todos se va.

Como dice el dicho popular: Huyen como ratas por tirante...

Saludos!

BE&P Consulting dijo...

Y, SI MARIEL ES CIERTO, CUANDO EL BARCO SE HUNDE...
PERO MAS QUE NADA CRISTINA TRATARA DE SACARSE DE ENCIMA A LOS FUNCIONARIOS MAS CUESTIONADOS, PARA HACER BUENA LETRA Y TRATAR DE RECUPERAR ALGO DE CREDIBILIDAD.
SALUDOS