¿Dólares o pesos?

El vice ministro de Economía, Axel Kiciloff quien se desempeña como director en Aerolíneas Argentinas, y como director de la vieja-nueva joya repatriada en sólo un 51%, la petrolera YPF, es sin duda un inútil pero todoterreno. El también es otro de los funcionarios que sistemáticamente ha venido desmentido la intención oficial de pesificar buena parte de la economía, incluida la compra y venta de propiedades. Sin embargo el titular de la administración federal ingresos públicos AFIP, con quien no mantiene una buena relación le tapo la boca. Ricardo Echegaray fue categórico sobre la pesificación en este mercado, explicó que ahora todo lo involucrado a la compra de una vivienda se pagara en pesos y que este gobierno ha tomado la decisión de apoyar al comprador que tiene los pesos, y acompañarlo si quiere adquirir una propiedad en pesos y no en dólares, lamentablemente en esto el mercado nos va a empezar a escuchar y entender, dijo. La respuesta de Echegaray no deja incógnitas respecto de la intensión del gobierno por pesificar buena parte de la economía, los requisitos solicitados por la Afip para adquirir divisas vinieron para quedarse. Es una política de gobierno la de establecer más controles y puso por ejemplo que también se está efectuando con la declaraciones de importaciones o con controles aduaneros.

Respecto al dinero en efectivo que llevan consigo los turistas, recordó que por la ley de Lavado de Dinero no es posible salir de la Argentina ni ingresar a otro país con más de US$10 mil. También tranquilizó a los viajeros al anticipar que los bancos no deben ni deberían en el futuro estrechar límites para así no limitar los gastos en el exterior. Estas declaraciones respecto al dólar fueron realizadas en el marco de la presentación de los números correspondientes a la recaudación tributaria y frente a los propios datos oficiales del INDEC que mostraron una importante caída de la actividad economía. Es decir, que en el Gobierno piensan que la inflación no es un motivo de mayor preocupación al igual que el impacto que tiene el precio del dólar marginal en los precios. La pesificación comenzó a implementarse en la práctica con los ahorros en divisas extranjeras y con la compra venta de propiedades, esa es la conclusión más relevante, el gobierno no va a alentar el atesoramiento en dólares. Echegaray dijo también en referencia a los comentarios del senador Aníbal Fernández quien había admitido negociaciones con las casas de cambio para llevar el precio del dólar marginal a $5.10 cosa que no ocurrió, el funcionario fue contundente, ningún funcionario del gobierno tiene instrucciones de reunirse con personas del mercado ilegal. Esta aclaración le sirvió a Echegaray para decir que el dólar paralelo es de un mercado de vivos y asevero que no se conversaría con nadie en el mercado ilegal, sino que se desarrollarían más acciones de fiscalización y control para combatir la venta ilegal de divisas.

Y para que no quedaran dudas volvió a insistir en que no está en la intención de gobierno pactar con especuladores y evasores. En el mismo orden de cosas, advirtió a los comercios que no están habilitados para vender dólares que si lo hacen deben aceptarlos al valor oficial. Les recordó que no son casas de cambio y que la Afip controlará a quienes tengan en su poder dichos dólares para evitar que los vendan en el mercado marginal, de hecho ya se efectuaron 1893 procedimientos en supermercados, restaurantes y hoteles que compraban divisas a un tipo de cambio diferencial. Echegaray critico, aunque sin mencionarlo al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti quién señalo que se podía apelar a la Justicia ante la imposibilidad de adquirir dólares. Es que existe optimismo a nivel oficial pues la Justicia ha fallado a favor de la medida rechazando los amparos recordando que la petición de información está dentro de las facultades que tiene la Afip analizar el comportamiento fiscal del contribuyente. Pero uno de los aspectos más polémicos es el desconocimiento que existe de los parámetros de la Afip para adquirir divisas. Sobre este punto, Echegaray admitió que la fórmula es personal a partir de los ingresos y los gastos pero sin dar mayores precisiones. Consiente que este es un punto álgido, el funcionario intentó minimizar su impacto y explico que la población que busca comprar divisas para ahorrar es solo el 3%, es decir, aquella que vive en zonas bien acomodadas del país.