abril 29, 2009

ESTRATEGIAS

Desde el Senado de la Nación, el jefe del bloque oficialista, Miguel Pichetto afirmaba que no había una emergencia nacional cuando que la ministra de Salud, Graciela Ocaña estaba recorriendo el país y funcionaban todos los instrumentos de control. No hay necesidad de una ley entonces, concluyo. Apenas horas después del escándalo político que provocó la negativa de la Casa Rosada a que el Senado aprobara un proyecto que declaraba la alerta epidemiológica nacional por el avance del dengue, Néstor Kirchner en medio de su encendido discurso proselitista frente a los 1200 militantes en San Miguel, improvisó una férrea defensa del Gobierno en esta “cuestión sensible”, como denomino a la epidemia de dengue. Es una vergüenza que se diga que surge por la pobreza, el dengue puede surgir en cualquier lugar, sea pobre o rico. El jefe peronista relativizó el crecimiento de los casos y la gravedad de la epidemia y agrego que Brasil tiene 300, 500, 1000 veces más dengue que la Argentina. Uno de los temas que más aquejan al Gobierno ya se metió en la campaña oficialista, y si, hay algo en lo que Kirchner no erró, hoy los casos se dan en cualquier estrato social, si claro, si es una epidemia no? Ahora de ahí a comparar Argentina, un país con aproximadamente 49 millones de habitantes con Brasil, que tiene más de 300 millones, como dicen los jóvenes parece que a Néstor se le escapo la tortuga no?

Sin embargo, el dengue siguió extendiéndose en amplias regiones del país. En la provincia de Buenos Aires se confirmaron casos autóctonos, en la zona metropolitana. Las cifras oficiales indicaban la existencia de 14.180 personas infectadas en todo el territorio nacional. Entre ellas, varias víctimas fatales. Tras el fracaso de la sesión del Senado por orden presidencial, es decir de Néstor Kirchner, ya no quedan dudas respecto de la política del gobierno nacional de manipular la realidad. Solo hace falta ver la actitud tomada por el gobierno de México respecto de la gripe porcina, fue inmediato el accionar y la publicación en todos los rincones del mundo, haciendo una muy clara descripción de la gravedad, los casos, etc. El síndrome del Indec se metió en la salud, para quedarse. Es una parte de esta estrategia de no mostrar lo que no gusta no hablo del dengue y no declaro la emergencia, aunque el brote se extienda, y escondo la pobreza manipulando las estadísticas ese es el método.

El proyecto cuyo tratamiento el kirchnerismo postergo para siempre declaraba la alerta epidemiológico nacional y creaba el Instituto Nacional de Medicina Tropical, que debería radicarse en alguna de las provincias del Norte. La parte más significativa del proyecto se encontraba en la instrumentación del plan de control del dengue elaborado por la Organización Panamericana de la Salud, en el que se establecen los mecanismos de prevención y programas de combate. Estipulaba que el jefe de Gabinete debía disponer la reasignación de partidas necesarias para atender la situación generada por la epidemia. Estos actos de gobierno son una clara señal del desconocimiento del enemigo y va a traer problemas. La epidemia está instalada, llegó para quedarse, y la gente no está concientizada. Era sin duda necesario responder a la emergencia sin manipulación política. Lo que hizo el Gobierno fue, ni más ni menos que tapar la punta del iceberg.

2 comentarios:

Mariel dijo...

Es la actitud, según las creencias populares, de cuando la suegra va de visita a la casa del hijo, y la nuera guardó toda la tierra debajo de la alfombra...
Metemos todo debajo de la alfombra...minimizamos...tapamos....ocultamos...como quieran llamarlo, muy distino a las actitudes del resto del mundo...
Muy distintas son las consecuencias también...no?

Saludos!

BE&P Consulting dijo...

NUNCA MEJOR DEFINIDO, LIMPIAR POR DONDE MIRA LA SUEGRA.
GRACIAS MARIEL0.