julio 10, 2009

CRISTINA KIRCHNER, EL DIA DESPUES

Francisco de Narvaéz, el día después de su victoria sobre Néstor Kirchner en las elecciones de diputados nacionales por Buenos Aires declaro que el de los Kirchner era un gobierno autista, que se encontraba muy lejos de la realidad. Lo cierto es que desacertado no esta ya que el empresario hizo esta declaración luego del discurso de la presidenta Cristina Kirchner en el que intentó minimizar el alcance del resultado electoral. También es cierto que el Gobierno tiene una visión sesgada que le impide reconocer la realidad y si se hace un análisis básico del discurso que la Presidenta dio, se puede ver que en pocas palabras, quiso explicar lo inexplicable intento dar una explicación matemática que llama la atención para concluir que, en todo el país, el oficialismo había obtenido más votos que la oposición. La tarea del gobierno no debería haber sido la de aferrarse a esa idea sino la de tomar medidas contra la inflación, el desempleo o la gripe porcina.

Para diferenciarse, De Narváez comenzó a darle forma a un frente legislativo con la oposición para impulsar ya en el Congreso una ley que permita darle aire al sector agropecuario. Inclusive contra todo pronóstico recibió la llamada de su rival vencido, el gobernador bonaerense Daniel Scioli, quien lo felicitó desafiando al hombre fuerte de la Argentina que se escondía en Olivos. El electo diputado le reclamó al mandatario una definición acerca de si iba a asumir su banca o no, pero Scioli no dijo nada hasta pasado el mediodía, tras reunirse con Kirchner en Olivos, comunicó que había decidido que se quedaría al frente de la provincia para terminar su mandato. Así se convirtió en el primer candidato que confirmó lo testimonial de su postulación. Tras dedicarse por la mañana a atender periodistas, descansar tras los festejos que se prolongaron casi hasta el amanecer y almorzar como invitado en un programa de América TV, De Narváez retomó los embates y exigió que la Presidenta asumiera el papel protagónico que nunca debió dejar, textualmente dijo que debía retomar las riendas del Poder Ejecutivo nacional. Pero Cristina Kirchner por el contrario entendió que no había que rectificar ningún rumbo, y no solo perdió una oportunidad para dar una señal positiva a la ciudadanía, sino que dejo bien claro que este es un Gobierno que está dispuesto a no atender la voluntad popular.

Como comentamos al inicio, el día en el que su marido y ex presidente Néstor Kirchner renunció a la presidencia del PJ, Cristina Kirchner pidió temprano que la Casa Rosada organizara una conferencia para explicar ella misma que la derrota no había sido tal, que no se reuniría con los opositores que ganaron, ahora ha hecho cambios ridículos de Gabinete aunque ese día dijo que no los haría, no modificará la política oficial en el Indec, y tampoco oirá más las quejas del campo por las retenciones. Así se plantó la presidenta Cristina Kirchner en conferencia de prensa tras la derrota en las elecciones legislativas. Escoltada por el ex jefe de Gabinete, Sergio Massa, y el ministro del Interior, Florencio Randazzo, que permanecieron una hora y media, estáticos al lado del atril, Cristina Kirchner definió que, a partir de ese momento, la garantía de la gobernabilidad la tendrían que dar los dirigentes de la oposición. Provista de papeles con datos de cada provincia, la jefa del Estado comenzó con un relato pormenorizado cargado de números inútiles que había preparado temprano con su marido. En ningún momento incluyo entre los padres de la derrota a su esposo. Sobre los polémicos números del Indec, la Presidenta volvió a defenderlos. Puso punto final al debate que lleva el kirchnerismo, en otro de los temas irresueltos, como el conflicto con el campo, la Presidenta volvió a descartar cualquier baja en las retenciones. Y para rematar la conferencia de prensa agregó un dato erróneo cuando se le consultó sobre aquella propuesta de Kirchner de que el campo se sometiera al veredicto de las urnas. Allí dijo, que todos los principales dirigentes del agro que se presentaron a elecciones perdieron, y citó sólo los casos de Formosa y de La Pampa. Pero obvió mencionar que igual esos dirigentes ingresaron en el Congreso y que en Entre Ríos el Acuerdo Cívico y Social, que llevaba a tres postulantes del agro, había salido primero contra el PJ de Sergio Urribarri y Jorge Busti. Sin duda, la Presidenta, lamentablemente, sigue viendo otra película.

2 comentarios:

Mariel dijo...

Es como cuando Rodriguez Saa dijo que ganaban en una mesa en Necochea...
O cuando Menem dijo que ganaron en Perico...
En esos momentos suelen revalorizar el triunfo en aquellos lugares sin resonancia...
Acá, en Entre Rìos, me tomé el trabajo de analizar la elección por departamentos, aquellos basados en lo productivo y con gente emprendedora votaron por el cambio...
Aquellos cuya mayor parte de la población vive del asistencialismo, por voluntad propia, no porque no haya trabajo, o formas de lograr el sustento, ganó el oficialismo...
Con todo ello, no les alcanzó...tal como Ud dice a menudo, hasta esas personas se están dando cuenta de las cosas...

Saludos.

BE&P Consulting dijo...

Aquellos cuya mayor parte de la población vive del asistencialismo, por voluntad propia, no porque no haya trabajo, o formas de lograr el sustento, ganó el oficialismo...

MAIEL, EL ANALISIS QUE HAS HECHO ES IMPECABLE, Y YO DIGO, A ESTE PARRAFO QUE COPIE TEXTUALMENTE, QUE SE LE PUEDE AGREGAR.
SALUDOS.