febrero 08, 2011

Camioneros

Ramón Toto Lorenzo es protesorero de la seccional Mar del Plata del sindicato de choferes de Camiones desde hace dos años. Fue convocado por el actual secretario general del gremio, Héctor Martínez. Desde su puesto duplicó la cantidad de afiliados marplatenses que originalmente eran unos dos mil y hoy alcanzan casi los cuatro mil, sumó nuevos delegados, y como era lógico trabajó lealmente para Moyano. Pero se equivoco, y no solo una vez. Primero encabezo una serie de reclamos que no fueron bien recibidos por los Moyano y que fueran realizados por él y el secretario gremial, Juan Carlos Robles, en los cuales se solicitaban pavadas; como que funcionase mejor la obra social porque su servicio es extremadamente deficiente, y que se les permitiera usar dentro del camping, el quincho que según denunciaron sólo lo usa Moyano para actos políticos. Su segundo error que termina definiendo el intento por parte del titular de la CGT de sacarlo del medio, fue cuando Eva Moyano le pidió ayuda para “voltear” a Martínez, el líder del sindicato en Mar del Plata, y se negó. Inmediatamente fueron desencadenándose hechos lógicos y propios de una forma de actuar sindicalista; ya no pudo entrar más a su oficina, la rompieron toda y le cambiaron la cerradura. A partir de allí el enfrentamiento con la cúpula marplatense de Camioneros no tuvo retorno, Moyano usa a sus lacayos, y cuando quieren asomar la cabeza los quita del medio.

Hugo Moyano, el gremialista más poderoso y nefasto del país, mandamás de la CGT, presidente del PJ de Buenos Aires, empresario, hoy enfrenta una rebelión en el lugar menos pensado, Mar del Plata, la ciudad donde nació, el gremio en el que se formó, y en el que su hermana, Irma Eva Moyano, es secretaria adjunta. Desde el año pasado entonces un grupo de delegados decidió enfrentar su conducción, y a ellos los nuclea nada más ni nada menos que el protesorero de Camioneros Mar del Plata, Ramón Lorenzo, el hombre que manejó mucho dinero muy importante en el sindicato, y que ahora es una especie de arrepentido, que aparte denuncia que en el gremio del jefe de la CGT se cometen irregularidades administrativas, financieras, aprietes y persecuciones laborales a los que no son afines. Nunca antes un dirigente de confianza de Moyano había contado cómo funciona Camioneros desde dentro, hoy Lorenzo habla y confiesa que para quedarse hay que arrodillarse ante él. En Mar del Plata esta su hermana, que nunca fue camionera. Lorenzo, empleado de una empresa de transporte y logística, no es un dirigente más de Camioneros. Es protesorero y fiscal de la mutual marplatense hasta septimebre del 2011. Gracias a esos puestos conoció la mecánica interna del gremio. En diciembre pasado su enfrentamiento con sus ex jefes alcanzó uno de los puntos más virulentos. Lorenzo y el secretario gremial Robles detectaron que la mutual había convocado para el 10 de diciembre una asamblea general para ratificar la aprobación de la Memoria, Balance General, Cuentas de Gastos y Recursos e informe del Órgano de Fiscalización de los años 1998, 1999, 2000, 2001, 2002, 2003, 2004, 2005, 2006, 2007, 2008, 2009, 2010.

Es decir, la mutual buscó los balances de trece años de gestión en su solo día, son varios millones de pesos. Lorenzo y Robles denunciaron que la maniobra fue realizada para esconder las irregularidades financieras, gastos sin control. La mutal es la caja de Moyano, y recauda mucho dinero a través de bonos contribución que se le cobran a los afiliados y otro que se le cobra a las empresas de Mar del Plata. La denuncia que hace junto a Robles, la presentaron en una carta documento alertando al Instituto Nacional de Cooperativismo y Economía Social (INAES), el organismo que debe legislar y controlar a las mutuales de los sindicatos, y también hicieron llegar otro escrito a la Dirección Provincial de Personas Jurídicas (DPPJ). Lorenzo y Robles dicen que es imposible que el 10 de diciembre la asamblea general de la mutual de Camioneros Mar del Plata haya podido cerrar de manera correcta los balances de trece años de gestión ¿Quién se acuerda de esos gastos? Los camioneros de hoy iban entonces a la escuela primaria. En las denuncias presentadas ante el INAES y la DPPJ, Lorenzo y Robles aseguran que la plata recaudada por la mutual a través de los bonos contribución como el que se le cobra a las empresas de 1.000 pesos, no se declara en su totalidad. El presidente de la mutual marplatense de Camioneros es Héctor Martínez, y no está involucrado, pero, la secretaria, Eva Moyano si lo está, dato que no resulta para nada curioso, es más que obvio.

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