Del 2011, tercera parte

Días después de haber sido liberado bajo fianza, el líder del gremio de los empleados bancarios Juan José Zanola realizó declaraciones en las aseguro que detrás de la causa judicial que lo investiga e involucra dentro de la llamada mafia de los medicamentos, y que lo llevó a la cárcel durante 25 meses, existía una mano negra. Aunque en un principio lo hizo sin dar nombres ni precisiones, minutos después de dar esa declaración, aseguró que parte del gobierno y de intereses financieros decidieron que fuera preso y apunto al ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández como el responsable de que la justicia no lo dejara antes en libertad. En primer término, el titular de La Bancaria apuntó contra la actuación del juez federal Norberto Oyarbide y volvió a reiterar su inocencia en los cargos que se le imputan, tras la denuncia por el fallecimiento de un numero aun no conocido de afiliados a la obra social de los bancarios por consumo de medicamentos adulterados. No hay ninguna prueba de nada, absolutamente, dijo, han armado una causa con un expediente que contiene cantidad de folios y más folios, en los que a veces se repiten las mismas cosas.

Parece que Zanola entiende que esta fue la regla con la que se manejó el juez Oyarbide, procesándolo injustamente. Es decir, el es una víctima de la incompetencia que es de público conocimiento en los manejos del juez federal. Dijo también tener una opinión formada respecto del magistrado, pero que no la daría aun. Esto sostuvo Zanola en su primera exposición pública tras pagar los $700 mil para poder así dejar el penal de Ezeiza. Luego durante otra conferencia organizada en el Hotel Intercontinental, el dirigente gremial volvió a reiterar que hasta el momento no habían probado absolutamente nada en su contra y delató según su humilde criterio, muchas fallas en la pesquisa de los miles de troqueles falsos encontrados. Este acecino y ladrón de guante blanco, fue capaz de decir que si había muertos por medicamentos adulterados debería haber habido mínimamente exhumación de cadáveres, pero que como no las hubo él no podía tener certeza de esas muertes. Todo fue un montón de mentiras durante una campaña mediática, explico y aseguro tener libertad de conciencia al tiempo que expreso que no cargaría toda la culpa sobre el juez Oyarbide, porque según su opinión es solo un actor de reparto en esta historia.

Ahora parece estar preocupado por su buen nombre de honor, ya que sigue insistiendo en que no hay absolutamente ninguna prueba que lo incrimine como para haber tomado tamaña medida que no solo lo afectó sino que también afectó a su esposa, Paula Aballay y sobre todo afectó al Policlínico y a La Bancaria. Zanola también vinculó a un sindicalista exiliado dentro de La Bancaria, ahora en las filas de la oposición interna, Hugo Dessal, quien fue la primera persona en revelar las supuestas irregularidades con los medicamentos y según dice Dessal es el responsable de todo. El sindicalista aseguró que todavía retiene en su poder la conducción del gremio, cuestionó a los 19 gremialistas que firmaron una declaración desconociendo su cargo de secretario general y se mostró preocupado por la marcha de las paritarias para 2012. Al tiempo de hablar de sus opositores, expresó que los que quisieron hacerle daño no lo han logrado teniendo en cuenta que su lista gano las elecciones dentro del gremio.

Indicó su preocupación por el resultado de las paritarias y por lo que hará el gremio, aunque aclaró que no se entrometería en una negociación que él no encabezo, entendió que están obligados a terminarla ellos. Hay órdenes de valor que son prioritarias como defender a los afiliados antes que nada. Terminada la conferencia, Zanola dio una entrevista radial y volvió sobre sus denuncias contra el gobierno pero agregó que el haber sido consecuente pero no obsecuente le trajo estos problemas y se preguntó porque ahora ser dirigente gremial es sinónimo de delincuente. Personalmente me atrevo a responderle, su pregunta; ser sindicalista es sinónimo de delincuente desde hace muchísimos años en la Argentina, no es nada nuevo.