enero 06, 2012

Del 2011

En varios artículos durante este mes, repasaremos los últimos hechos y los más relevantes del año que acaba de finalizar. En todos los casos, se tratara de actos de gobierno, el congreso, y situaciones de todo tipo en torno al cierre del año. En un acto realizado en la localidad bonaerense de Lomas de Zamora, segundo distrito electoral del conurbano bonaerense y utilizando como es habitual desde hace tiempo la cadena nacional, la presidente Cristina de Kirchner anunciaba que se elevaría el monto de los fondos administrados por la Administración Nacional de Seguridad Social, Anses, para dar créditos a los jubilados y pensionados. Aparte, anunciaba que para estos préstamos se limitarían las tasas de interés que cobran las entidades privadas que les prestan dinero. Quería de esa manera la Presidenta realizar un anuncio, precisamente en el lugar donde se estaba inaugurando una oficina de la propia Anses. Sabiéndola a la señora una enamorada de los anuncios sin sentido y que generalmente terminan siendo sólo anuncios que jamás se concretan, en esta oportunidad con todos sus recursos idiomáticos anunciaba su enorme deseo de ocuparse de un problema que afecta a algo más de 2 millones de personas.

En el ejercicio de su verborragia explicaba que se modificarían los códigos de descuentos de los jubilados, que usualmente tienen que pagar tasas de usura. Todo esto, lógicamente frente a las cámaras que transmitían por cadena nacional utilizando dinero público. Según reveló la jefa de Estado, cual si fuera el secreto mejor guardado, pero es información a la que quien lo desee puede acceder, existen 589 entidades habilitadas para otorgar préstamos, entre las que figuran cooperativas, asociaciones mutuales y sindicatos. Y en otro de los pasajes que más le atraen de sus épicos discursos comenzó a hablar de números, algo que la apasiona pero de lo que entiende nada. Nuevamente intentó explicar porcentajes, y montos prestados pero se le hizo difícil. En resumen lo que quiso explicar es simplemente que entre los meses de enero y junio de 2011, de un total de 85% de lo prestado lo otorgó solo 12% de esas entidades, y que el monto total de créditos otorgados alcanzo los $10.910 millones. Al tiempo que se propuso denunciar las tasas usureras con las que se aprovechan de los jubilados, Cristina aseguró que las entidades cobran hasta 122% de interés, mientras que las tasas promedio alcanzan el 70%.

Además anunció gloriosamente, que disponía a partir del día siguiente se destinasen por lo menos hasta un 20 por ciento del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la Anses para los créditos. Desde todo punto de vista, algo ridículo entendiendo que dicha situación es una forma de desfinanciar la propia caja de aportes jubilatorios ya que eso es el Anses. Habló además, de la relación cuota – ingreso y fijó un monto máximo de afectación respecto del haber jubilatorio que no debería superar el 30 por ciento del mismo. La tasa que se reconozca para estos préstamos en la Anses solo puede ser hasta 5% más alto que lo que cobra el Banco Nación para el mismo crédito, y además el Costo Financiero Total (CFT) debe incluir el costo de la cuota social. Cristina explicó que hoy el CFT del Banco Nación para a 12 meses es de 22,93%, y en 24 meses es de 27,35% y de 30,80% para préstamos a 36 meses. Los privados solo podrán cobrar 5% por encima de estos.

En su humilde opinión la administración nacional cree en el crédito pero no acepta la usura institucionalizada. La medida entraría en vigencia con la publicación en el Boletín Oficial del Decreto de Necesidad y Urgencia 246, que contiene los anuncios. La presidenta precisó que en homenaje al brillante economista y subsecretario de Comercio Exterior, Iván Heyn fallecido en Montevideo el decreto debería llevar su nombre. El titular ejecutivo de la Anses, Diego Bossio, acompañó a la Presidenta durante el acto y el sostuvo que es una gran medida que pone fin a la situación de abuso que varias entidades crediticias efectuaban sobre uno de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, como son nuestros abuelos. A partir de ahora, no habrá posibilidad de que se aprovechen de los jubilados cuando solicitan un préstamo, porque el Gobierno establece reglas directas y claras, dijo Bossio, hace un mes y medio. Ahora, de los créditos todavía ni en la Anses ni en ninguna entidad pública o privada, se sabe nada.

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