La Carta Orgánica del BCRA

La iniciativa originalmente impulsada y que luego anunciara la misma presidente Cristina de Kirchner durante la apertura de las sesiones en el Congreso el 1 de marzo pasado, respecto del proyecto de reforma a la Carta Orgánica del Banco Central, y que se convirtió en ley en el Senado es algo más que una mera reforma. Los cambios que se producirán en la entidad que dirige Mercedes Marcó del Pont permitirán al Gobierno, entre otras cuestiones, disponer de más reservas excedentes y nuevos adelantos al Tesoro, es la garantía de financiamiento que el Gobierno no tenía en un año en el que la situación fiscal aparece más que complicada. De hecho, algunos indicios de este particular diagnóstico los había dado la propia Marcó del Pont cuando visitó las comisiones de ambas Cámaras. En Diputados reconoció que sin la reforma al cálculo de reservas, sería inevitable un ajuste brutal, y en el Senado reconoció que ya no existen las famosas reservas de libre disponibilidad, por lo que en la actual situación la entidad no podría enfrentar legalmente el pago de deuda a bonistas. La sanción del proyecto se produjo tras una discusión de cinco horas y media que se inició minutos pasadas las 20, y luego de que el Senado aprobó el traspaso de los servicios públicos de pasajeros de la órbita nacional a la del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Al defender la iniciativa, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Aníbal Fernández, argumentó que las reservas son de todos los argentinos y no de los vivos que se quieren llevar el dinero y hacer la diferencia. A decir verdad, no hay que ser muy inteligente para entender que la razón fundamental de esta reforma es que se pretende ampliar la base de financiación del Banco Central hacia el Estado, sin pasar por adelantos del tesoro, o de la propia administración nacional de seguridad social. Esta reforma a la Carta Orgánica del Central nos pone en riesgo sin duda de generar más inflación. El cambio que establece la ley modifica todo el esquema, desde ahora será el directorio, sobre la base de parámetros que aún no se conocen y que la jefa del Central tampoco pudo precisar, el que fije el nivel mínimo de reservas necesarias para garantizar la base monetaria. El resto podrá aplicarse a cancelar deudas. Pero la reforma aporta novedades que van más allá de ese punto. Por ejemplo, le permite al Banco Central, dentro de sus nuevas funciones, regular tasas de interés que aplican los bancos, el destino del crédito que otorguen entidades públicas y privadas y la regulación de toda actividad que esté relacionada con el sector financiero, incluyendo la distribución de caudales o compensaciones entre entidades, la intención es clara manejar todas las decisiones del mercado financiero. Por otra parte, define que serán funciones esenciales la promoción del empleo y el desarrollo económico con equidad social, además de promover la estabilidad monetaria y financiera. La nueva Carta Orgánica tiene otras curiosidades que inquietaron a la oposición tanto en el debate en Diputados como en el Senado, pero más preocupan a los inversores o a la gente común. La eliminación de toda mención al seguimiento de la inflación o de las causales de remoción de los integrantes del directorio. Y sin duda el punto más cuestionado del proyecto es la modificación del artículo 20 de la Carta Orgánica, en el que se establece la capacidad prestable del BCRA al Tesoro. Hasta ahora fijaba que podría adelantar por un plazo de 12 meses, que normalmente se renuevan, hasta una cantidad equivalente al doce por ciento de la base monetaria y, al mismo tiempo, hasta un diez por ciento de los recursos en efectivo que el Gobierno nacional haya obtenido en los últimos doce meses. A eso se sumara ahora que con carácter de excepcional y si la situación o las perspectivas de la economía nacional o internacional así lo justificaran podrán otorgarse adelantos adicionales también por el diez por ciento de los recursos en efectivo sumando así otros 45.000 millones de pesos al Gobierno para financiar gasto publico. Y este es solo el principio de lo que harán.